NO toda la información que aparece en internet es real. En muchas ocasiones algunas personas escriben noticias o correos electrónicos con propósitos muy diferentes a informar, ofrecer productos de calidad o facilitar trámites a los ciudadanos.
Hoy queremos compartirte algunas de las modalidades de engaño que han logrado gran popularidad en la red, describiendo en detalle sus características así como las medidas de prevención que debes tener en cuenta a la hora de revisarlas, compartirlas o en en peor de lo casos, realizar transacciones que pueden resultarte costosas.
Las más comunes en los últimos años han sido las llamadas telefónicas. Ojo, no brindes información ni la confirmes, no te comprometas a realizar transacciones. #VamosSeguros
Noticias falsas o fuera de contexto
Es muy común encontrar, principalmente en Facebook, posts publicados desde páginas web con apariencia de portales noticiosos cuyos administradores no poseen información verificada y sin embargo redactan artículos con títulos muy impactantes para llamar tu atención, en los que se anuncian sucesos sorprendentes o poco convencionales; un ejemplo real son aquellos artículos en los que se anuncia la salida alguna empresa de nuestro país, o la supuesta muerte de personajes reconocidos cuando están más saludables que nunca.
También resulta común (a veces sin intención) que se vuelvan virales noticias antiguas, generando falsas expectativas en las personas. Un ejemplo claro puede ser un articulo antiguo en el que se anunciaba la visita de un artista famoso a Colombia; alguien decide postearlo sin revisar la fecha, luego otra persona lo comparte, alguien más también decide hacerlo y así sucesivamente, generando la idea de que este artista volverá, cuando su presentación ya fue hace años.
¿Qué hacer?
Ante las noticias falsas, si el tema es realmente de tu interés, valdrá la pena revisar si otros medios, ojalá reconocidos, han publicado lo mismo, incluso revisar qué tipo de datos se utilizan para sustentar la información, qué fuentes tienen, y echar un vistazo a la página web que lo publica pues puede tratarse de medios con procedencia desconocida o portales dedicados a publicar contenidos de corte satírico o humorístico, como Actualidad Panamericana, Agencia Pinocho, The Onion entre otros.
Respecto a los artículos antiguos, basta con revisar la fecha en que fueron publicados, y así podrás saber con certeza si vale la pena compartirlo o no.
Oferta engañosa de productos o promociones
Mucho se ha hablado de la publicidad engañosa y claramente las redes sociales no son la excepción, pues sirven como medio para que los estafadores hagan de las suyas ofreciendo productos o servicios que no son tan buenos milagrosos como parecen. Recientemente la Superintendencia de Industria y Comercio, como miembro de la Red Internacional de Protección al Consumidor, se unió a una campaña para para prevenir dos prácticas muy comunes:
- “Precio por goteo”: consiste en que puedes encontrar un producto o servicio a un precio muy atractivo y decides comprarlo. Luego de hacer la transacción la persona o empresa que lo ofrece, te realiza cobros que no fueron anunciados inicialmente que pueden ser cargos adicionales como impuestos, repuestos o artículos que debes comprar para que el producto inicial funcione bien, entre otros gastos que llevan a que ese precio tan atractivo en principio, se incremente de manera significativa.
- “Trampas por suscripción”: se trata de promociones que lógicamente son muy llamativas en las que te piden registrarte a través de una página web para ofrecerte un producto o servicio, supuestamente de manera gratuita. Efectivamente es posible que la primera vez no te cobren, pero de allí en adelante comienzan a exigirte pagos periódicos o suscripciones no deseadas.
¿Qué hacer?
La prevención es la herramienta más importante, y comienza por el conocimiento de tus derechos como consumidor que están establecidos en el Estatuto del Consumidor que hace unos años se encuentra vigente y en el que puedes informarte de manera detallada sobre cuáles son las condiciones en las que te deben ofrecer un producto o servicio y así mismo qué responsabilidades tienes a la hora de adquirirlos. Este puedes encontrarlo en la página web http://www.sic.gov.co/drupal/estatutos-consumidor
En un sentido más práctico, debes revisar el sitio web en el que aparece la oferta, respondiendo preguntas básicas como:
-¿Qué tipo de empresa está haciendo la oferta?
-¿Tiene reconocimiento en el mercado?
-¿Posee un lugar físico en el cual sea posible presentar quejas o reclamos?
-¿Existen números de contacto?
-¿Qué contempla la frase “Acepto las condiciones” para esta oferta específica?
Respecto a esta última pregunta, es común hacer click en el recuadro donde aparece el visto bueno (conocido como “chulo” en Colombia) sin leer las condiciones de uso o ingreso, establecidas en esa sección y es ahí donde das la oportunidad para que quien realiza la oferta pueda involucrarte en negocios o intercambios de los que no tenías idea.
Correos o mensajes fraudulentos
Esta modalidad no podía quedar por fuera de toda la variedad de engaños expuestos anteriormente. Esta práctica, también conocida como “phishing” consiste en el envío de correos electrónicos y mensajes bajo en nombre de entidades gubernamentales, bancarias o de servicios en general con diversos contenidos:
- Algunos por ejemplo son enviados supuestamente desde la DIAN con el asunto “Carta de embargo DIAN e Invitación a pagar de manera urgente sus Obligaciones” en el que te informan que tienes una supuesta deuda con la entidad y te solicitan ingresar a un link para ver los detalles de la misma.
- Otros, al contrario, tienen noticias positivas en las que una entidad bancaria te informa que has ganado un premio por tu buena conducta en los pagos, antigüedad con el banco, porque ganaste un sorteo por ser un buen cliente, entre otras cosas. Pueden llegar a tu correo o por mensaje de texto. Allí seguramente también aparecerá un link o contacto para que puedas comunicarte y así recibir tu reconocimiento.
- También es posible que simplemente te lleguen solicitudes para actualización de datos a través de formularios cuya apariencia puede llegar a ser idéntica a los que utiliza la empresa.
Sería larga la lista de cosas y contenidos que los estafadores te pueden enviar, lo importante es entender que toda esta “creatividad” tiene un solo propósito y es acceder a tu información personal para quitarte dinero o hacer transacciones en tu nombre.
¿Qué hacer?
Antes de reaccionar a cualquier solicitud enviada a tus medios electrónicos, lo más importante es comunicarte directamente y de manera inmediata con la entidad a través de los medios publicados en sus sitios oficiales y así mismo denunciar ante las autoridades en en Centro Cibernético Policial, cuya dirección es www.ccp.gov.co para que desde allí se realicen las acciones pertinentes. El dicho popular donde se dice que “de eso tan bueno no dan tanto” es bueno tenerlo presente, y adquirir el hábito de verificar toda la información que recibes y es de tu interés, pues nunca se sabe quién está del otro lado de la pantalla.