Debido a los violentos cambios climáticos y los efectos que hemos soportado, no solo en el país con El Fenómeno del Niño, sino a nivel mundial con variaciones ambientales, económicas y sociales; El Banco Mundial nos comparte algunas buenas prácticas para enfrentar las variables del tiempo, sobre todo en un periodo en el que la temperatura de toda la Tierra incrementa.
Diversificar:
Hay que tener condiciones adecuadas de suelo y agua, sin embargo, según el Banco Mundial, lo ideal es tener personal capacitado para trabajar con cultivos alternativos acordes con las condiciones climáticas.
Aprovechamiento de agua
Reforestar las partes altas de las cuencas y tecnificar el riego para optimizar el aprovechamiento de agua, sobretodo en tiempos donde la falta de lluvias no permite llenar los reservorios ni regar los campos que dependen de ellas.
Productos alternativos
El impacto de altas temperaturas o lluvias constantes afecta tanto a productores como a consumidores por escasez de productos o alimentos en un momento determinado. Es necesario buscar productos o cultivos alternativos que se adecúen al momento.
Racionamiento de agua y energía
Según el Banco Mundial, la idea se debe tener en cuenta siempre. Tal como lo planteó el Presidente Santos, debe ser una cultura de ahorro. El ahorro de agua y energía permite que haya recursos disponibles para otras actividades o para momentos en que el recurso sea escaso.
Prepararse como país
Sequias que acaban con cultivos y contribuyen a un alza de precios de alimentos y lluvias que pueden ocasionar deslizamientos de los cerros, interrupción de las carreteras y afectación a diferentes productos son eventos probables con condiciones climáticas extremas. Inversión, acceso a créditos y ahorro hacen parte de estrategias de gobiernos como planes de contingencia.